De la escritura y la estupidez

Con la escritura, como siempre, tiene que ver el post de hoy; y la película que veremos tiene algo de estupidez, que a su vez viene con algo de escritura. O al menos eso creía cuando escribí la crítica de esta floja comedia española. No hay mucho que decir más que su título y proceder a reseñarla, y cuidado que esta no es cualquier reseña: es una de mis primeras, de por allá del 2005. Ya hay varias de ellas por el blog, pero por su poca longitud esta podría destacar.

La crítica de “El Furgón”, a continuación.

"El Furgón"

La ficción es un mundo fantástico. Cualquier cosa puede escribirse en un trozo de papel que un escritor tiene en su mano, y puede dirigirnos a un mundo que nunca visitamos. Tomen como ejemplo a Charlie Kaufman: que mente! Toma una idea, o quizá no, y empieza a demostrar su magia poniendo algunas palabras juntas.

A veces las cosas también pueden salir mal, incluso si la intención es buena. Ahora hablo de “El Furgón”. Llegaremos a lo de la escritura en menos de un minuto.

Veamos…Conocemos a un hombre estúpido. Conocemos a otro hombre estúdio, y a otro. Debido a las cosas estúpidas que hacen, terminan en un “furgón” (ese auto usado por la policía para llevar a los ladrones a la cárcel). Ahora tenemos a tres personas estúpidas juntas. Los tres hombres escapan del furgón por una estupidez. Ahora están en una casa abandonada disfrutando de la vida; y continúan haciendo estupideces! Claro, tenía que haber una chica; ella es hermosa y, adivinen…Estúpida! Dice que puede hablar inglés cuando lo necesita, pero habla el idioma pésimamente. La situación que se desarrolla luego de que la chica llega es una de las situaciones más estúpidas que jamás he visto en un film.

Este film me decepcionó porque me gusta lo que he visto del cine español; siempre me hace sentir bien. Tiene un estilo natural y cálido difícil de ver en otras películas. Benito Rabal, el director de la película, trata de impresionar con algunas tomas, pero no es lo suficientemente bueno (ni siquiera para la película que está haciendo). Cuando escribe (estábamos hablando de eso) trata de ser gracioso y nos reímos de algunas situaciones y de sus esfuerzos. Hizo un buen trabajo con su elenco, sin embargo. Poner en el reparto al experimentado Sancho García fue una acertada idea, y García le brinda un poco de clase al film. Pablo Carbonell hace lo mejor que puede con lo que tiene; y es gracioso, en un modo estúpido. El resto del elenco…No lo noté.

Eso es lo que ocurre a veces. No es culpa de los actores, no es culpa de los personajes. Quizá es la culpa de Benito Rabal, ¿quién sabe? Quizá la película tenía la intención de ser estúpida, a propósito. De todos modos, la estupidez está allí.

---5/10