El terror dentro del gran mundo cinematográfico

Quiero, antes de establecer los parámetros de esta semana, agradecerle a Facundo por todos sus comentarios desde que comenta en el blog: enriquecen mucho, sugieren films para tener en cuenta y ver y, como haría El Bigote (muy bien citando a D’Esposito), generan un poco de polémica. Dicho esto, te agradezco Facundo la diferenciación de ‘terror’ y ‘horror’; acuerdo en la situación que se da con los ‘twists’ de las películas del género-de hecho, hago mi mejor esfuerzo para no dar una explicación similar en cada crítica-; acuerdo en que detesto el ‘gore’ (aunque al final de la semana veremos una película que contiene mucha sangre y que lo vale); y te cuento que no he visto “The Mist” pero que Darabont me encanta y que en cuanto lo haga trataré de hacer honor con alguna crítica que valga la pena. ;)

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Vayamos entonces a lo que nos incumbe (como siempre): seguimos con el ‘terror’ (u ‘horror’, si leen la explicación de Facundo podrán determinar ustedes). Esta semana de mi vida va a estar muy movida, pero voy a hacer lo posible para que podamos ver varias películas, poco conocidas, pero de las que hay cosas para decir. Para empezar un film de origen Español (o norteamericano?), que en español se tradujo como “La séptima víctima”.

La crítica de “Darkness”, a continuación.

“Darkness”

Antes de comenzar acerca del film en sí, quiero recalcar lo increíble que es que Anna Paquin esté tan hermosa como siempre, y más importante, igual de talentosa. Debía decir esto porque parece conservar su belleza para verse increíblemente preciosa en cada una de sus películas. En el camino que está siguiendo, de seguir siendo una trabajadora constante (hace películas y series de TV, miniseries y producciones televisivas especiales; estuvo en “The Squid and the Whale”-aquí mi crítica-), Paquin protagoniza “Darkness”, una película filmada en España, donde ni una persona habla español (y algunos que hablan inglés no lo hacen muy bien; pero es común cuando un film está destinado para el mercado norteamericano); lo que mantiene las circunstancias lejos de la realidad, aunque sólo algunos actores españoles hacen un excelente trabajo hablando inglés. El grupo incluye a Fele Martínez (Carlos), que visto en otro film parecería muy viejo para ser el interés romántico de Paquin. Sin embargo, logra una interpretación admirable.

La historia es bastante floja, con un guión inseguro. Lo que sentí durante todo el tiempo era que la película se estaba copiando de otras; en el guión y la dirección. El director Jaume Balagueró consigue una imagen en el momento del “eclipse” que me recordó a “The Ring”; hay chicos corriendo por los pasillos, casi como en “The Gathering” (la veremos pronto); gente escondida en la oscuridad y trenes nocturnos muy similares a “Nos Miran”, también un film español. También todos los otros elementos, como las imágenes perturbadores, el niño pequeño que parece poseído y las tomas de la casa sola, que proponen inmediatamente que la misma está maldita/embrujada.

La edición (de Luis de La Madrid, quien editó muy bien algunas películas importantes) trata, y no entiendo por qué, de ser innovadora, pero se vuelve molesta y poco impresionante. Lo mismo puede decirse del trabajo de Balagueró y el resto de su equipo español. Igualmente, el cine español contiene cine de calidad, pero en este género (vean “La noche de los girasoles”, si la consiguen) podría estar faltando algo.

El interés de todo el elenco en la historia es notable; se puede ver en sus actuaciones. Lena Olin (María) derrocha drama y Ian Glein (Mark) logra un enfoque extremo a un rol que podría haberse interpretado con más sutileza. El papel que Stephan Enquist (Paul) tuvo que interpretar no es nada del otro mundo, pero lo sobrelleva con calma…Y también está Giancarlo Giannini (Albert), que algo interesante a la mesa trae.

Ahora, si bien es verdad que la película tiene fragmentos lógicos de otras, la idea principal es original y, aún siendo vergonzosa, Balagueró se pone desafiante en los últimos minutos. El final es realmente algo, muy diferente de lo que podría esperarse si este fuera un film del tipo referido previamente. Pero esta especie de ‘shock’ no justifica el desastre creado en hora y media.

Vi en algún lado que el director dijo algo como: “Tenía una idea, de algo imposible; ni una persona ni un demonio: la oscuridad”. Definitivamente, el hombre hace todo lo posible, en varias partes en que la pantalla se pone negra, para mostrar u honrar o hacer referencia a su título.

Lo que sigue siendo un dilema es que todas las películas de las que creo que este film ha tomado ideas fueron estrenadas exactamente el mismo año que “Darkness”; 2002. Podríamos cuestionar la inspiración, pero creo que hasta que descubra si su mente funcionó antes que las del resto, me conformaré, sin ser malo, con decir que Balagueró vio demasiadas películas ‘de terror’. Aunque si quieren más evidencia de su falta de originalidad, pueden tranquilamente alquilar “La monja”, el guión que escribió luego de hacer este film.

Y les estoy hablando del hombre que dirigió “Operación Triunfo: La película” (pequeño dato para el señor Vargtimen)…

---4/10