Thursday 16 October 2008

Un poco de Jackson

Con motivo del estreno de “Lakeview Terrace” de Neil LaBute (traducida como “Vecinos en la mira”), o quizá simplemente porque tenía ganas, quería dedicar un par de posts en la semana al gran personaje que es Samuel L. Jackson. Creo que le hice bastante justicia cuando critiqué “El negociador” y no sé si esta semana podrá competir actoralmente (aquí no vamos a hablar de números de taquilla, aunque al film de LaBute le fue muy bien en USA) con el ‘actor de acción’ por excelencia de los últimos tiempos, Jason Statham; menos sé si voy a ir al cine en lo que queda de la semana (bueno, seguramente el fin de semana a ver “Historias Extraordinarias”).

Lo que sí sé es que me encanta Samuel L. Jackson, alguien a quien también podríamos definir como ‘actor de acción’ que es capaz de elevar la calidad de las películas con su mera presencia. De una personalidad imponente, el actor ha sabido moverse durante su extensa carrera por varios terrenos, pero se lo suele recordar por aquellos films en que lo viéramos acompañado de algún arma; más precisamente un revólver (buscar cualquier imagen de él en “Pulp Fiction”).

Buen actor siempre-de eso no hay dudas-, Jackson ha tenido la mala suerte de tropezar esta década con roles que no lo han favorecido para nada, salvo excepciones. Las excepciones estarán mencionadas en las dos críticas de esta semana, pero las dos películas que veremos (una muy buena y otra regular) se encuentran aquí porque significan-para mí-las mejores de todas estas interpretaciones brindadas del 2000 para acá (destaco que no vi ‘todas’ esas películas, pero que tomo lo mejor de lo que vi; y que obviamente su trabajo en “El protegido” queda libre de toda evaluación).

El film de hoy (desconozco si se estrenó en el país) lo encuentra, como para marcar una diferencia, a Jackson alejado de las armas…Ver para creer?

La crítica de “Coach Carter”, a continuación.

“Coach Carter”

Hay mucho para decir acerca de “Coach Carter”, dejando de lado el simple hecho de que es un muy buen film. Su director, Thomas Carter, debe de ser un hombre con mucha determinación y un trabajador dedicado. Su cámara se mueve como si conociera el territorio de memoria; con mucha libertad y confianza. A veces para estar como en la mano de alguien, porque se mueve demasiado; quizá porque hay mucho para ver en esta película.

Lo mismo ocurría en “Save the last dance”, una pieza muy bien dirigida por Carter que lidiaba, entre otras cosas, con problemas raciales, tal como lo hace “Coach Carter” en algún grado. Pero Carter no es ningún escritor, sino un director que podría parecer escritor porque realmente quiere dirigir el material que se le presenta. De cualquier modo, aquí los escritores son una mezcla de expertos en los temas con los que la película necesitaba lidiar.

Mark Schawn creó “One Tree Hill”, un programa de TV en el que los personajes principales juegan al básquet, al igual que los personajes de este film. También escribió “The Perfect Score”, un film que lidia con algunos aspectos similares (pueden leer mi crítica aquí) a los de “Coach Carter”. El último escritor es responsable de dos películas de deportes; una acerca de amor (“Summer Catch”) y otra acerca de sueños e inspiración (“Hardball”). Es el equipo perfecto.

Y un resultado perfecto también; porque su guión no contine fallas, al menos en los temas principales que presenta. “Nos trataremos con respeto”, Ken Carter (Samuel L. Jackson) dice durante su primer entrenamiento en la escuela Richmond. Debe de ser un buen entrenador, porque su hijo (un sólido Robert Ri’chard) se mudó de una secundaria privada y cómoda a una que gradúa al 50% de sus estudiantes, sólo para entrenar con su padre.

Ken Carter es un buen entrenador, pero en sus propios términos. El año anterior a su llegada, el equipo de la escuela ganó sólo cuatro partidos; ahora están invictos. El hombre está cumpliendo con su trabajo, pero no con la totalidad del mismo. La otra parte consiste en un contrato que cada estudiante firma antes de entrar al equipo: incluye tener que asistir a todas las clases en primera fila; mantener un buen promedio y usar corbata en los días de partido. Técnicamente, al no seguir estas reglas, los estudiantes están fallando.

Pero para el entrenador Carter todo están fallando, porque son un equipo, y esto es lo que él intenta enseñarles, indirectamente. “Cuál es tu mayor miedo?”, le pregunta a Timo Cruz (sorprendente Rick Gonzalez), cuando lo hace completar una tarea imposible para volver al equipo…Qué significa eso? “Qué hace tu padre?”, le pregunta a Jason Lyle (el debutante Channing Tatum). “Mi papá está en la cárcel”, responde el chico. “Preguntate si querés terminar como él”, concluye Carter.

Sus métodos generarán controversia, será cuestionado por todos pero lo que realmente importa no es lo que los padres pienses, o lo que piensen los directores del colegio; lo que realmente importa es lo que los chicos creen que es mejor para ellos, y lo que desean para su futuro.

Todo el elenco joven es adecuado. Nana Gbewonyo, Antwon Tanner. Son todos talentosos, especialmente Rob Brown (el pibe de la gran “Finding Forrester”) como Kenyon Stone, un joven inteligente con una novia embarazada (el director vuelve a lidiar con el embarazo joven, como en su film anterior), interpretada con naturalidad por Ashanti.

Sin embargo, el generador del ambiente y la cabeza del proyecto es el señor Samuel L. Jackson, con su cabeza pelada y una mirada ambigua. Acostumbrando a hacer el papel de “el tipo” (“the man” en inglés suena mejor), tal como lo hizo en “S.W.A.T”, “Shaft” o tiempo antes en “One Eight Seven”, Jackson deja de lado la soberbia y crea un personaje definido humanamente, en lo que es su mejor y quizá menos vista actuación de la década; comparable con el dedicado padre que nos regaló en “Changing Lanes”.

No haré comentarios acerca de la música cursi que tanto detesto y que olvidé mencionar en mi crítica de “The Longest Yard” (aquí pueden verla); pero diré que funciona, por más que intentemos rechazarla…Para concluir, el hecho de que “Coach Carter” esté basada en una historia real, me deja aún más sorprendido de lo que ya estoy de este logro cinematográfico.

---8/10

9 comments:

Alan said...

Una de las pocas películas de baloncesto que me parecen recomendables no sólo para los que seguimos este deporte.

jb said...

Una película que tenía ganas de ver, pero no lo hice todavía (tengo cierta debilidad por el subgénero deportivo y busco a ver cual está buena, cosa que rara vez pasa, pero pasa) Y sí, a Jackson se le va a complicar con el maestro Statham (el británico antipático más simpático desde Walter Mateau) muy bueno eso del "actor de acción por excelencia" Además, parece que la peli de Donalson es más y, guiandome por el método (del Matsan era el método?) el trailer de la de Samuel no me inspira, como la lluvia a Biraabent
"Soy carlos, soy carlos, el negro que sabe jugar basquetból"...

jb said...

Chapa: A vos que te gustan las encuestas: en el sitio de los butabi (el link está en lo de mangosta y en fancinema y en el mío: etsegun.blogspot) se está terminando la encuesta sobre la peor película de Spielberg
Hablando de sitios aprovecho para recomendarte el de Andrés: Cinematofilos. Es muy bueno si bien, en general, es más histórico que de crítica es realmente interesante (claro que no tengo nada contra la historia) Saludos nimios

Popurrí said...

La vi, varias veces, la suelen pasar por TNT y Cinecanal una vez cada dos meses. Me gustó bastante, porque toca bastantes temas de actualidad, aunque no soy un fanático del basquet. Por motivos personales me "entretiene" más el Jackson de SW pero acá hace una mejor actuación, se mete más con el personaje que tiene que vestir.

Paz!

Anonymous said...

Hombre pues puestos a decir que papel me gusta más... casi me quedo con el de Freedomland (película que parece nadie ha visto), sí es una película rara y no especialmente buena pero el tipo hace un papel que mezcla a todos los demás: un poco de coacher (los chicos con problemas y tal), un poco de negociador (con una Julianne Moore a mi juicio estupenda), un poco de hombre de acción, un poco de drama...En fin no se, por aportar algo distinto a lo ya sabido... Dèsirée

Dèsirée said...

anda he olvidado hacer bien la entrada

jb said...

Grande Desireé ¿Ahora tienes nombre! ¡y quizá blog en un futuro cercano (o lejano o de mediano plazo)?
Sí, es cierto esa es mejor. Acá fue derecho a vídio, como dicen uds.
Además, la peli tiene sus altos y bajos y una solución bastante interesante. confieso que en esa peli Jackosn más que el policía del barrio parece el cura del barrio pero ese no es su problema sino del guión y del interés de los productores por mostrar a los policías como "utiles para la comunidad" Pero está muy buena la idea de "seguro que mi hijo está en este barrio de negros" y, como dije, la resolución

Dèsirée said...

Ja, nombre sí, blog no, ni a corto ni a largo. Si acaso una foto junto al nombre

ElChapa said...

Alan: Me alegra que te haya gustado, sobretodo porque te gusta el deporte y escribes sobre eso!

Facundo: Véala entonces, que lo vale...

Grillito: Acertadísimo como siempre...no tengo más para agregar

Desirée: me queda pendiente "Freedomland" (tantas pendientes contigo), además porque ver a Julianne Moore siempre es una bendición..

A ver quien vio la que viene mañana
Saludos Sospechosos